Había un ambiente de júbilo, de gozo, de alegría donde entregamos todas nuestras cargas , nuestros problemas y estábamos ligero de equipaje es por eso que podíamos saltar, danzar disfrutar de estar en la casa de de Dios celebrando su presencia y agradeciéndole por habernos escogidos.-
Nosotros somos como un metal, el cual tiene que pasar por un proceso para poder sacar lo mejor de nosotros, todo lo que nos sucede en nuestras vidas por doloroso que parezca tiene un propósito. Si Dios te bendice antes de pasarte por ese proceso no sabrías agradecer ni valorar lo que has recibido, pero cuando ya eres una persona que paso por el proceso de morir primero, entonces ya estás preparado para recibir lo que Dios tiene para ti.
La diferencia de una persona que no es cristiana y una cristiana es que El Cristiano verdadero sabe agradecerle a Dios y alabarlo en medio de la crisis, su fe no se debilitar si no que al contrario se fortalece con las tempestades.
Si queremos redimir esta ciudad tenemos que entregar todo lo que tenemos.
Juan 12:25 El que ama su vida, la perderá y el que aborrece su vida en este mundo, para vida eterna la guardara.
Muchas veces cuando nos hablan de entregar hay cosas que no queremos entregar y es por esto que nuestro crecimiento espiritual se encuentra estancado, solo aquel que está dispuesto a entregarlo todo, que está dispuesto a morir a la carne, entonces podrá estar en su presencia. Dios nos redimió pago un precio por nosotros y no le importo que tan alto estuviera el precio para nuestra salvación, el lo hizo pues porque nos amabas, si realmente amas a Jesus entonces debes pagar el precio.
Juan 12:24 "De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto."
Que tan dispuesto estamos a entregar nuestra vida por Dios.




0 comentarios:
Publicar un comentario